sábado, 27 de octubre de 2012

LA HOMOSEXUALIDAD DEBE SER ATENDIDA EN SU ASPECTO EMOCIONAL, PSICOLÓGICO Y ESPIRITUAL PARA QUE SEA PERMANENTE SU SANACIÓN Y LIBERACIÓN


Cap. 2 Diez realidades acerca de la Homosexualidad
(Continuación)


Pregunta Dos.- ¿Quieres cambiar?

Realidad número 5: La homosexualidad es aprendida.   

Dios no hizo a nadie homosexual; tampoco los genes, las hormonas o la biología. Dios hace a todo ser humano heterosexual. Se sabe que hay algunos factores que pueden predisponer a alguien a desórdenes emocionales tales como defectos de nacimiento y sensibilidades prenatales, aunque ninguno de estos causa la homosexualidad. Hay también otros factores de índole espiritual como ciertos maleficios de los que se valen los demonios o entes del mal para estar acosando, por decirlo de esta manera, a algunos niños y adolescentes, para provocar ciertas circunstancias que los conduzcan a la conducta homosexual, de este punto hablaremos más tarde.  

Para muchos estudiosos del tema de la sexualidad y de las causas de su desviación, hay una gran coincidencia de opiniones de que la homosexualidad no es hereditaria ni el resultado de algún tipo de desequilibrio glandular, o de una codificación de genes o cromosomas. Lo que les ha permitido concluir que los homosexuales se hacen, no nacen. La homosexualidad es aprendida como una reacción frente a las experiencias dolorosas de la infancia, razón por la cual puede ser desaprendida.  

Es decir, que la homosexualidad es una desorientación que ha sido aprendida psicológica y emocionalmente.  

Hemos visto cómo muchas personas, miles, han podido cambiar esa desviación de las corrientes de agua de su sexualidad, que se habían desviado por el cause de la homosexualidad en la medida que comienzan a reaprender y experimentar su yo emocional en forma más positiva, con la ayuda de nuestra consejería de “Arcoíris”; y fundamentalmente con y por la acción vivificante, liberadora, sanadora y restauradora del Espíritu Santo y de su Divina Esposa la Siempre Virgen María.

El fracaso de muchos tratamientos psicológicos y psiquiátricos se debe a que se ha dejado de considerar la dolorosa realidad del influjo de determinado tipo de entes malignos o demonios que inclinan a los seres humanos a permanecer cayendo en este tipo de conductas homosexuales, que los degradan y los llevan por un camino de desesperación, desesperanza, soledad, señalamiento, adicciones a alcohol y drogas y hasta el suicidio al que nunca hay que recurrir. Para eso está “Arcoíris”, para que tengas una “sanación integral” de la triple dimensión de tu ser como hijo de Dios que es el Creador de todo ser humano.

Recuerda que el ser humano tiene una triple dimensión con que Dios nos crea a todos, con espíritu, alma o mente y cuerpo, y que esta triple dimensión es afectada en diversos sentidos por el medio ambiente en que nacemos y nos desenvolvemos. Y en este contexto acontecen muchísimas cosas del mundo de lo sobrenatural, tanto de los ámbitos de lo Divino como de lo maligno. Este es un campo tan basto y especial, perteneciente a la Ciencia Divina, de lo sobrenatural, repetimos, del que no tienen ningún conocimiento ni psicólogos ni psiquiatras, salvo muy, pero muy contadas excepciones. Para nuestra fortuna Arcoíris dispone de expertos en estos campos de conocimiento y de experiencia espiritual, por lo que puedes tener mayor confianza en tu total recuperación de la salud integral que tu persona, tan amada por Dios, quiere.

Realidad número seis: Nadie escoge sentirse homosexual inicialmente.

Nadie hace una elección en su infancia por la que comenzó con la desorientación emocional. En una gran cantidad de casos sucedió en una muy temprana etapa de la vida, y a causa de las primeras experiencias del medio ambiente en que vivían con sus padres, hermanos, familiares, compañeros, maestros, y de otras personas significativas, de cuyas circunstancias se valieron también los demonios, para actuar en esta inclinación y llevar a los hijos de Dios a un mundo cruel y lleno de muy diversos sufrimientos, del etiquetamiento de la sociedad, del sufrimiento psicológico interno, del rechazo de la familia y de la sociedad, pero hasta de los demás compañeros que padecen de homosexualidad que recrudecen este mundo con los peligros de las enfermedades, de los robos, de la explotación y el chantaje, de la ridiculización de la corporeidad y de la personalidad, y de otras circunstancias tan llenas de artificialidad, banalidades y vacíos, además del peligro de la condenación eterna de su alma, si teniendo la opción de sanarse se prefiere la continuidad en el mundo del pecado grave de la sodomía y otros similares.

La incursión en el mundo de la homosexualidad en muchas ocasiones tuvo que ver especialmente con la insatisfacción en el vínculo de amor con su padre y madre, pero más frecuentemente con el padre de su mismo género.

A medida que la vida transcurrió, la homosexualidad se volvió una tentación, una atracción hacia el mismo sexo, y una tercera elección pecaminosa de comportamiento que se hizo cuando consintió sentimientos, pensamientos y atracciones homosexuales.  

Realidad número siete: La homosexualidad tiene muy poco que ver con el sexo.  

Está mucho más relacionada con una herida emocional y psicológica que deja a una persona necesitada, vacía, irrealizada e incompleta, en cuanto al vínculo que necesitaba experimentar con el padre de su mismo género. Más aún, se siente abrumado, perseguido y necesitado de mucha autoestima.

El aspecto sexual de la homosexualidad es un intento por suplir las necesidades de amor e intimidad que nunca fueron adecuadamente formadas entre el niño y el padre de su mismo sexo. Como tal, no es verdaderamente un problema sexual. Es sexual tan solo en la forma como se relaciona con las necesidades de la intimidad que la sexualidad simboliza. Es como el impulso compensatorio que está involucrado en el deseo homosexual. El impulso está motivado esencialmente por la necesidad de suplir deficiencias que se presentaron a temprana edad en la relación padre e hijo.

La necesidad persistente de amor del mismo sexo surge de la temprana necesidad insatisfecha de amor del padre del mismo sexo o, por el contrario, de la inhabilidad de recibir dicho amor, ya sea que haya sido ofrecido o no.  

Pregunta cuatro: ¿Sabes cómo cambiar?

Realidad número ocho: La homosexualidad es un problema emocional, psicológico y espiritual.  

No es tan solo emocional y psicológico, sino también es espiritual, esta es la contemplación completa e integral para lograr la sanación y la liberación de los entes del mal que inciden en la vida homosexual 

Aquellos que proponen remedios psicológicos exclusivamente están errados, y tiene la grave responsabilidad de conducir a sus pacientes al fracaso y la frustración por las recaídas que se observan cuando solo son atendidos psicológicamente. No solo ignoran la realidad de que el comportamiento homosexual está arraigado en nuestra naturaleza pecaminosa heredada por nuestros primeros padres Adán y Eva, sino de todo el ámbito de realidades en que participan los seres malignos espirituales, son entes de mal que se introducen en las personas, en otros casos las merodean y susurran ideas para la comisión del pecado y hasta el influjo directo en el pensamiento y en los genitales, recto, y otras partes del cuerpo. 

Y existe un más profundo y basto campo de sucesos y presencias espirituales de las que hay que tener un serio y formal conocimiento, además de otros aspectos que deben tenerse en cuenta, para dar apoyo y lograr la sanación y liberación de las personas que viven presas de la homosexualidad y de otras desviaciones que hemos aludido anteriormente.

Se ignora también el trabajo esencial del Espíritu Santo en la sanación de la homosexualidad y de los propósitos y caminos más amplios en los que Dios quiere y puede actuar para liberar y sanar a millones de seres humanos que hoy sufren como una pandemia de desviaciones y perversiones infernales en el Mundo, donde se hacen pactos intencionales y de manera consciente, y hasta con propósitos deliberados donde se incluyen políticos, artistas y hasta clérigos.  

Realidad número nueve: La recuperación es un proceso que toma tiempo y tiene sus razones de ser así.   

Algunos supuestos sanadores y muchos hermanos nuestros que quisieran su salud casi instantánea, a veces hacen oraciones como esta: “Señor, líbrame de toda homosexualidad en este mismo momento, instantánea y completamente”. ¿Y qué sucede entonces?, debido a que no reciben una sanación instantánea y completa se desmotivan, se enojan con Dios, le echan la culpa de su condición e incluso llegan a blasfemar Su Santo Nombre, y por sus razonamientos equivocados empiezan a desesperarse y su fe llega incluso a bambolearse y debilitarse.  

Entonces viene la pregunta: ¿Por qué Dios no sana instantánea y completamente la homosexualidad si es que se hace esta oración de manera sincera? En algunos casos en que hubo conversión de conductas hacia la observancia de los Diez Mandamientos, y de conversión en otros ámbitos de religiones, y que este propósito duró muchos meses e incluso años en que se sintieron libres de la homosexualidad, pero luego les vinieron en la mayoría de los casos un retorno a las atracciones, sentimientos y deseos homosexuales, o incluso que han caído (han tenido otra vez uno o varios encuentros sexuales), se debe a que han olvidado atender el ámbito espiritual al que hemos hecho referencia por su falta de conocimiento.  

Además, Dios en su amorosa sabiduría, hay varias razones por las cuales sana progresivamente de la homosexualidad a una persona, en la mayoría de los casos.  

Analizaremos a continuación estas razones.

(Continúa en las Razones por las cuales se sana progresivamente la homosexualidad por parte de Dios).

lunes, 22 de octubre de 2012

TÚ PUEDES CAMBIAR, LA HOMOSEXUALIDAD PUEDE SER DESAPRENDIDA.


Cap. 2 Diez realidades acerca de la Homosexualidad
(Continuación)
Pregunta Dos.- ¿Quieres cambiar?

Seguramente tu respuesta será inteligente y dirás: “Por supuesto que quiero cambiar”

Encontraremos varios deseos para querer cambiar, como los siguientes:

·         Me siento avergonzado de la manera como vivo.

·         No quiero seguir escondiéndome y viviendo una vida doble.

·         Ella quiere casarse y tener hijos; o tal vez ya los tengas.

·         Temo ser expuesto, descubierto.

·         No me gusta engañar a otros.

·         Ella cree que ser lesbiana no encaja con su autoimagen.

·         Temo contagiarme con el SIDA.

·         Se que las relaciones homosexuales no son permanentes.

·         Me siento un hipócrita como creyente.

·         Considero que mi estilo de vida es pecaminoso.

Todos estos son buenos motivos para desear el cambio. Pero un “deseo” no es suficiente. Debes ir más allá, ¿tienes tan solo un “deseo” o has hecho la “decisión de cambiar”? Un deseo es un sentimiento; es emocional; es fugaz; cambia de un día para otro. Una “decisión” es una determinación, un compromiso, un acto de la voluntad motivado por una obediencia amorosa a Dios, y la confianza en las promesas que Él ha dado, de manera personal, para ti como triunfador, a través de su Palabra. Estos permanecen firmes sin importar como se sientan hoy, o mañana. Ahora reflexiona bien: ¿Has tomado la “decisión” de ser un triunfador? ¿Ya estás consciente de que es un compromiso hecho sobre el fundamento sólido de fe en la Palabra de Dios?

Nosotros estamos para acompañarte en los momentos en que te sientas débil o con ánimo de desertar, ayudarte para rechazar las voces insidiosas de los entes malignos que querrán decirte que no lo puedes lograr; estamos para ayudarte a sostenerte ante las tentaciones de la carne y fortalecer tu espíritu.

Es importante memorizar los siguientes pasajes:

“Encomienda a Yahvé tu camino, y confía en Él; y Él obrará (Sal.37,5)

O aquel texto de la Escritura que ha sido el versículo milagro para la vida de muchos:

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados (Ro.8,28)

Y este otro pasaje:

“Pedid y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad; y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca; halla; y al que llama, se le abrirá (Mt.7,7-8)

O también:

“Yo iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y cerrojos de hierro haré pedazos; y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que soy Yo Yahvé, el Dios de Israel, que te pongo nombre. (Is.45,2-3)

La decisión que tú tomes debe estar basada en las promesas de Dios que acabamos de ver y que son para ti, porque su Palabra te sostendrá también durante las pruebas que vendrán en la recuperación de la homosexualidad.

En las palabras de Isaías, Yahvé te dice: “Yo iré delante de ti”. Hay muchos obstáculos en tu camino a medida que continúes el camino de sanidad y recuperación. Tú y yo estamos seguros que por ti mismo, solo, no estarías en condiciones de caminar rumbo a tu sanación y liberación, porque los entes del mal, los demonios de perversión sexual no querrían dejarte libre, pero Dios te dice que Él va delante de ti, y tiene poder sobre todos ellos; así que también es Dios quien dirigirá tu viaje, Él te ha llamado a realizarlo y es Él quien está tomando el liderazgo delante de ti. Él está en la primera línea de ataque. Él recibirá el primer golpe de fuego. Él es quien será herido (ya lo ha sido) y morirá (ya murió), para que tú no tengas que hacerlo. ¿Estas escuchando estas palabras que Dios te dice?

Te está diciendo que Él ‘enderezará los caminos torcidos’, ‘quebrantará las puertas de bronce’, y ‘hará pedazos los cerrojos de hierro’. Dios no va al lado tuyo o detrás de ti, sino en frente para poder enderezar los lugares torcidos.

Hay lugares torcidos en tu corazón y vida, los cuales Dios enderezará en tu peregrinaje. Él no promete que todo será fácil en este viaje, sino que cuando llegues a las montañas, aparentemente inconquistables, estará allí para allanarlas, de manera que al escalarlas no quedes exhausto. Cando llegues a aquellas grandes y pesadas puertas de bronce que tú no puedes abrir, las puertas de tus emociones heridas y adoloridas, Él estará allí para ayudarte a derribarlas. También hará pedazos los cerrojos de hierro de tus defensas para que no tengas que continuar viviendo a la defensiva, como la has hecho durante varios años.

¿Qué te dará Él a medida que inicias este peregrinaje y el mejoramiento? Él te dará los tesoros escondidos, las riquezas almacenadas en lugares secretos, y la libertad de experimentar una vida emocional y espiritual, profunda y abundante, algo que en verdad no has vivido durante toda tu existencia.

Muy dentro de ti, donde tu ‘niño interior’ fue herido, has sido restringido y limitado emocionalmente. Pero recuperarás estos tesoros secretos, y experimentarás una nueva y profunda libertad emocional y espiritual, como nunca antes habías conocido. Esta es la sanidad de la cual han sido testigo muchos hermanos nuestros, cuando el Espíritu Santo trabaja a través de los consejeros que Él ha llamado para ayudarte en la labor de recuperación.

Se cumplirá lo que hoy Dios te dice: “Para que puedas ver que soy el Señor, el Dios de Israel que los hacía vencer y triunfar sobre sus enemigos y los abastecía de alimentos cuando me tenían como centro de sus vidas”.

El viaje a través de la sanidad de la homosexualidad hará incluso más que ayudarte a recuperar tu heterosexualidad. Realmente llegaras a conocer al Señor, a adorarle y disfrutarle para siempre. ¡Alabado sea el Señor!

Dios dice que te ha llamado a este peregrinaje ‘por nombre propio’. ¿Escuchas lo que está diciendo? Él te ha llamado por tu propio nombre. Te conoce por nombre, personalmente, y ha estado escuchando el deseo de tu corazón de ser sanado de la homosexualidad. Te ha escuchado a ti como persona, y sabe todo acerca de ti como ser único. Conoce tu comienzo desde el vientre de tu madre (Sal.139), y todo acerca de cómo se originó la homosexualidad en ti, y cómo sanarla, con tu cooperación. Te conoce, te conoce por nombre y por nombre te ha llamado a este recorrido de sanidad.

“No dejes pasar estas Palabras de Dios hasta que formen una roca como el fundamento de tu decisión para desear cambiar. ¡DETENTE! ¡Toma esta decisión ahora mismo! ¡No adelantes nada en absoluto hasta que lo hagas! Ves: La realidad número dos es que deseas cambiar y que has decidido hacerlo con base en la confiabilidad de la Palabra de Dios. Has determinado, basado en la Biblia y el compromiso prometido por Dios, cambiar”.

Pregunta Tres: ¿Sabes que realmente puedes cambiar?

Realidad número tres: La homosexualidad se puede vencer. Tú puedes vencer la homosexualidad y recuperar tu heterosexualidad. Literalmente miles lo han logrado, y lo están logrando. Las personas no solo han dejado ese estilo de vida, no solo han abandonado el comportamiento homosexual pecaminoso, sino que han recuperado los deseos heterosexuales. Los sentimientos y deseos heterosexuales sí retornan.

Los matrimonios pueden ser fortalecidos y renovados. Las atracciones homosexuales declinan y disminuyen. La “H” de la homosexualidad se torna una “h”. ¡Hay esperanza, y esperanza cierta!

¿Qué ventajas trae tu recuperación? Incluye la habilidad de poder continuar con planes de carrera, educación, familia y maritales.

Durante las etapas de recuperación vas a ir experimentando suficiente libertad para continuar con tus metas de una vida productiva, en lugar de sentirte obstaculizado, restringido, inhibido y limitado. Jesús te ofrece y produce una vida plena y de realización.

Es importante lo anterior, porque hay que saber que la autoimagen y la autoestima de una persona se basan, en gran medida, en lo que se piensa y se siente de sí mismo. Una autoestima y una autoimagen mejoradas dependen del logro de esas metas y planes de vida. Una pobre autoimagen (PAI), y una baja autoestima (BAE), son la raíz de la desorientación homosexual. Mas adelante veremos como una pobre autoimagen y una baja autoestima, forman las carencias emocionales iniciales que como causas fundamentales, originan la desorientación homosexual.

Cuando Jesús te ayuda a sanar y elevar los índices de tu autoestima y de tu autoimagen, te sentirás tan bien que no desearás ser como otras personas de tu mismo sexo, aunque reconozcas que sean atractivas, porque sabrás valorar que tú tienes lo tuyo y que es tan valioso y único como no existe otro en el Mundo.

Durante el proceso habrás aprendido muchas cosas importantes que han sido causa de la desviación de tu heterosexualidad; habrás aprendido a reconocer y manejar los sentimientos heridos, que estás ocupado en transferencias con personas que te afectan como lo hicieron tus propios padres, y cómo esto estimula a tu ‘padre interior crítico’.

Habrás aprendido a hacer elecciones apropiadas; elecciones que sean positivas y constructivas. Habrá una renovación y sanidad general de tu personalidad. Gran parte de la sanidad de la homosexualidad, desde una perspectiva psicológica, es la renovación de los patrones emocionales de pensamiento y de comportamiento. Estos cambios te permitirán experimentar un mayor crecimiento emocional, estabilidad, autocontrol, gozo, paz, paciencia, desprendimiento, contentamiento, menos estrés y tensión, y mayor madurez espiritual. Este buen fruto es el resultado de la actividad sustentadora y del poder sanador del Espíritu Santo; del Espíritu de Cristo en ti.

Realidad número cuatro: Lo pecaminoso es involucrarse deliberadamente en comportamiento homosexual (pensamientos y acciones), no la desorientación. Solamente aquello en lo cual nos inmiscuimos deliberadamente puede ser considerado pecado. Todo lo demás es tentación, y tú debes aprender esta diferencia. La mayoría es intolerante aun frente a la tentación más pequeña, e incluso siente que ésta es pecaminosa. Pero, por el contrario, deberían considerar únicamente la que es pecaminosa, es decir, aquella que propician y se permiten. Los sentimientos, atracciones, impulsos, deseos, anhelos, todos son solo tentaciones. Actuar, mental o físicamente, con base en alguno de éstos, es pecado.  

(Continúa en: Cap. 2. Realidad número 5: La homosexualidad es aprendida)

sábado, 20 de octubre de 2012

REALIDADES EN TORNO A LA HOMOSEXUALIDAD


Capítulo 2
Diez realidades acerca de la Homosexualidad

En cuanto a las diez realidades en torno a la homosexualidad, debemos formularnos cuatro preguntas muy importantes dado que está en juego no solo el bienestar emocional, familiar, social y económico, sino el bienestar más importante dado por nuestro Creador para todos y cada uno de sus hijos que somos los seres humanos. Como Padre, Él nos ama infinitamente y siempre quiere lo mejor para nosotros, aunque luego requiera, como todo “padre” que debe educar a sus hijos, de darnos buenos ejemplos, principios, enseñanzas y hasta algunas nalgadas o correcciones cuando nuestros pasos nos ponen en peligro, tanto de perder la vida física, que dura un breve tiempo y se da cuando estamos sobre la Tierra, así como de perder la vida espiritual para retornar junto a Él al término de nuestra existencia en el Mundo, y ocupar nuestro lugar en la Casa del Padre Eterno donde no hay más sufrimiento ni prueba alguna.

Pregunta Uno: ¿Sabes que te conviene, que puedes y tienes qué cambiar?

Recuerda que tú puedes formar parte del gran grupo de personas que padecieron la homosexualidad y se han vuelto triunfadores. La diferencia básica es que cuando tú has decidido dejar de formar parte del grupo que ha creído y se ha dejado engañar con que ser homosexual, es como una especie de clase de tercer género de la sexualidad por el que se puede optar, aunque las leyes que van contra las Leyes de Dios así lo pretendan en cualquier país, tu carácter, valentía y decisión por lo mejor y dejar de sufrir y estar atrapado en un estilo de vida homosexual, tú sabes que tienes ahora la posibilidad de cambiar, que puedes hacerlo porque ya no estás solo nunca más, que es conveniente para tu vida presente y para tu vida después de la existencia en este Mundo que es la de una trascendencia eterna y de felicidad, y que Dios que tanto te ama y te ha dado una Madre maravillosa, te ofrecen su ayuda para liberarte de las redes de los engaños y tormentos de la vida homosexual. Esto te coloca ahora en la mejor posición, en la de estar listo para tomar ventaja de la vida de Gracia que Dios desea manifestar sobre ti, en la medida que comiences a caminar por los senderos de recuperación de tu orientación sexual de manera sana, sabia y santa, porque santo es el que obedece los mandamientos divinos, no solo el que hace milagros o el que han puesto en los altares.

Podemos ahora empezar a hablar de manera madura y sin temores, sin escrúpulos ni maquillajes que solo encubren una situación real que hace que las personas se encuentren sumidas en el estilo de vida homosexual, del que son víctimas por las diversas circunstancias de su vida y que Dios conoce de cada uno. Por eso Él ahora te ofrece Su ayuda para tu liberación, para tu sanación.

Bien, pues abordemos entonces la realidad número uno: Dios llama al comportamiento homosexual PECADO, para lo que debemos trabajar juntos con la finalidad de cambiar esta conducta y orientación, para que las corrientes de agua de nuestra sexualidad vuelvan a su debido cause.

Necesitas tomar ya esta decisión, no dejes pasar más tiempo, mira lo que dice la Palabra de Dios, hoy no te la dice para causarte miedo, sino para hacerte libre, porque Jesús nos ha dicho que “la verdad nos hará libres”:

“¿No saben que los injustos no poseerán el Reino de Dios?  No se engañen: no serán recibidos en el Reino de Dios los que tienen relaciones sexuales prohibidas, ni los que adoran a los ídolos; ni los que cometen adulterio, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los tramposos, ni los usureros. Algunos de ustedes fueron esto, pero ahora han sido lavados, en el nombre de Cristo Jesús nuestro Señor, y por el Espíritu de nuestro Dios, y están consagrados a Dios y en amistad con Dios. (1 Co.6, 9-11)

Y en el libro de los Romanos encontramos el mismo sentido de los caminos de perversidad que Dios reprueba y no quiere para el hombre:

Por eso Dios permitió que fueran esclavos de pasiones vergonzosas; sus mujeres cambiaron las relaciones sexuales normales por relaciones contra la naturaleza. Igualmente los hombres, abandonando la relación natural con la mujer, se apasionaron unos por otros, practicando torpezas, varones con varones, recibiendo en sí mismos el castigo merecido por sus extravíos.

Despreciaron a Dios al no tratar de conocerlo, según la verdad, y él, a su vez, los abandonó a su corazón sin conciencia, que los llevó a cometer toda clase de torpezas. (Ro. 1,26-28)

Para una persona que no quiere entender el valor de la conversión al camino de Dios, estas palabras de las Sagradas Escrituras pueden parecerle tan solo trivialidades, pero para aquella que quiere nacer de nuevo por obra del Espíritu Santo, ha de saber que entregarse a toda clase de pensamientos, deseos y comportamientos homosexuales es pecaminoso y lo inducen a cometer el pecado.

No basta llamarse a sí mismo católico, cristiano, o de cualquier otro credo y negar al mismo tiempo la pecaminosidad de la homosexualidad, ni tratar de racionalizar y negociar o justificar de todas las formas posibles estas conductas para poder involucrarse en los placeres carnales, mantener su dependencia emocional o los vínculos románticos con otra persona del mismo sexo. Piensa que es cierto que Dios conoce todas las circunstancias que desde tu infancia pudieron haberte inclinado a la vida homosexual, pero piensa también que Dios tiene el poder suficiente para liberarte de sus ataduras y restituir tu salud integral para que puedas disfrutar de una vida de plenitud desde este Mundo.

Piensa lo siguiente, como nos lo confirma la Sagrada Escritura:

“…el que no naciere de nuevo, no puede ver el Reino de Dios porque: lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es (Jn. 3,3 y 6)

Es claro notar aquí en este texto de la Escritura lo que Dios te está ofreciendo a través de este Ministerio de Arcoíris mediante su Blog; “el nacer de nuevo", para que seas como un hombre nuevo gracias a la poderosa acción vivificante del Espíritu Santo, por eso nuestro logotipo o escudo está presentado, en un Arcoíris que significa una Nueva Alianza tuya con Dios, donde está siempre presente el Espíritu Santo que te transformará y convertirá en un hombre nuevo como lo ha hecho con muchas otras personas.

Hay quienes torpemente quieren culpar a Dios por su condición de vida o inclinación homosexual, pero olvidan que Dios, en su Infinito Amor por nosotros, nos creó libres a todos los seres humanos, nos dotó del "libre albedrío" para elegir entre una cosa y otra, para elegir entre el bien y el mal. Es un asunto del buen o mal uso del "libre albedrío", de la libre voluntad. Muchos que escogieron el camino del mal y caen ante las seducciones de los seres infernales, como sucedió a Adán y Eva, tienen que sufrir las consecuencias de su mala decisión y de sus malos actos. A Dios que tanto nos ama, fue a quien más dolió la seducción de Satanás a Adán y Eva, pero diseñó de inmediato un Plan de Salvación para todos Sus hijos, plan en el que participan Él mismo, Su Hijo Jesucristo, el Espíritu Santo y Su Divina Esposa la Siempre Virgen María y en el que estás tú contemplado. Ellos nos ayudan de manera poderosa a restablecer las condiciones de nuestra vida, para una vida de plenitud o integral que incluye todos los ámbitos de tu existencia, pero requieren, por lo mismo que es un asunto de libre albedrío, de la aceptación de tu parte de Su Poderosa ayuda. Ellos nos transforman con nuestra voluntad y participación. La Trinidad Divina y la Madre de la Humanidad están contigo y te ofrecen su asistencia, Su Amor y Su Poder Sanador, su Fuerza Liberadora. Así que esta es la maravillosa noticia que hoy tienes para tu corazón, anda, anímate a ser liberado de las cadenas de la homosexualidad y de cualquier desviación sexual y a recibir Su Poder Sanador que te restaurará como un hombre nuevo, como un triunfador.

No debemos engañarnos en cuanto a lo que nos advierte el libro de Corintios. El pasaje de 1 de Corintios 6,9-11, provee abundante claridad en cuanto a dos cosas. Primero, las personas que continúan viviendo una forma de vida homosexual no podrán entrar en una relación viva y personal con Dios. Segundo, así, Él no podrá reinar en sus corazones, y continuarán distanciándose del Señor. Ninguna cantidad de racionalización o interpretación permisiva de los textos bíblicos podrá cambiar el verdadero sentido de la Palabra de Dios. El comportamiento homosexual es pecado porque la Palabra de Dios así lo afirma.

Cualquiera que haya recibido al Espíritu Santo puede renacer de nuevo, pues Él trazará una línea en su corazón; una línea entre lo que es correcto y lo que no. Ahora tendrá una convicción interna de que la homosexualidad no es correcta, que es una desviación de la corriente de su sexualidad con que Dios lo creó; y porque el hombre y la mujer saben en su conciencia que esos actos son pecaminosos, es que están luchando con deseos, sentimientos y tentaciones fuertes, donde actúan además entes espirituales malignos cuyo influjo es poderoso y su existencia es real, de la que no hablan acertadamente muchos psicólogos ni psiquiatras cuando nada saben del campo espiritual; y lo peor, al verse impotentes de liberar a una persona de estas fuerzas, terminan por decirle a las personas que se acepten con lo que sienten, cuando que esta es otra mentira, Dios no te creó con estas desviaciones en tu corriente de la sexualidad, y sí tiene el poder para liberarte y sanarte de toda fuerza, cadena, atadura y desequilibrio emocional porque para Él nada hay ni es imposible.

Para quien es necio y quiere mantenerse ciego, ninguna cantidad de tiempo que utilicemos discutiendo con ella, si no quiere ser regenerada, querrá ocultar incluso para sí misma, lo pecaminoso que son sus prácticas, pero al final de su vida sufrirá las consecuencias de que advierten las Sagradas Escrituras, y quizá hasta sufra en el Mundo las enfermedades que llegan a padecer quienes ejercen prácticas sexuales impropias, por eso mismo son llamadas relaciones sexuales de alto riesgo. Pero tú que lees estas líneas, estás ya recibiendo la acción del Espíritu Santo, deja que Él derrame sobre ti su Luz y te impulse a continuar por este camino de iluminación y reorientación de tu sexualidad.

Pero puedes preguntarte, ¿por qué? ¿Por qué Dios ha declarado que la homosexualidad es pecaminosa? ¿Quiere Dios negarle a una persona el placer sexual, o una relación amorosa? ¡No! Pero Él sabe que la homosexualidad no es parte de su diseño y propósito para la realización eterna, o para la felicidad terrenal del triunfador. La homosexualidad interfiere con el plan amoroso de Dios para el hombre y la mujer. ¿Y cuál es el plan?

“Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conforme a la imagen de su Hijo, para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó” (Ro.8, 29-30)

Su Plan es que el vencedor sea hecho conforme a la imagen de su Hijo, y que en Jesús haya vida abundante. El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; Yo he venido parta que tengan vida, y para que la tengan en abundancia” (Jn. 10,10) El plan de vida abundante se inició en el momento de la creación del tiempo, cuando Dios hizo al hombre para la mujer y a la mujer para el hombre. El cumplimiento de este propósito le da la gloria a Dios. Pero:

“Profesando ser sabios, se hicieron necios… y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío” (Ro. 1,22 y 27).

Observa este pasaje bíblico cuidadosamente. Declara que el comportamiento homosexual como otros pecados, surge de la negativa a honrar y reconocer a Dios. Si Dios no es reconocido, su Palabra es ignorada, lo cual hace que la naturaleza carnal se desvíe del diseño natural heterosexual que Él propuso para el hombre y la mujer. Debido a esto, la persona con tendencias homosexuales desarrollará un corazón sombrío y una mente fútil o necia. Cambia la gloria del Dios inmortal por la adoración de ídolos inanimados y humanos. Como resultado, Dios lo entrega a los deseos pecaminosos de su corazón, condición en medio de la cual, justificará el abandono de las relaciones naturales con el sexo opuesto, y se inflamará con lujuria frente al mismo sexo.

Si por el contrario, la persona que ha desarrollado la desorientación emocional y psicológica hacia la homosexualidad, honra y reconoce el juicio de Dios con respecto a la homosexualidad, recibirá la fortaleza y el poder para vencerla mediante la obra sanadora del Espíritu Santo dentro de él.

El creyente vencedor, como persona que quiere ser salva, sabe, por esta razón, que debe cambiar y que puede ser también un triunfador. El entiende que Dios desea su transformación porque confía en la amorosa sabiduría y Poder de Él para sanarlo; y porque le honra en Su Poder para librarlo y sanarlo de la desorentación homosexual, puede estar seguro de que ello se realizará con éxito y que él, puesto en Sus Manos, será un triunfador.

Este Ministerio de Arcoíris es totalmente confidencial, no se dan a conocer los nombres de quienes reciben nuestra asistencia. Los nombres que aparecen en los testimonios no incluyen apellidos, aun cuando las personas desean que sus testimonios se publiquen y difundan para más personas se animen y reciban los grandes beneficios que Arocíris les permite alcanzar.

(Continuará en: Pregunta Dos: ¿Quieres cambiar?

 

 

NUESTRA SEXUALIDAD ES COMO LA CORRIENTE DE AGUA DE UN RÍO, CRECE SEGÚN NUESTRA EDAD


Para comprender el mundo interno de la homosexualidad
 
Capítulo 1.2
¿Cómo entender que pasa con nuestra “sexualidad” desde temprana edad?

Para poder comprender qué pasa con nuestra sexualidad desde nuestra temprana edad la compararemos con una corriente de agua, es más sencillo entender así nuestra corriente de la sexualidad, podemos de esta manera equipararla como la corriente de aguas de un río por el que vamos caminando.

·        La corriente de la sexualidad.

Así como Dios nos creó, con una triple dimensión –espíritu, mente o alma; y cuerpo-, nos ha creado a todos bajo una sola forma y con una corriente de sexualidad de carácter heterosexual. Es importante tener bien claro esto, Dios creó a todas las personas “heterosexuales”. Pero el flujo de esa corriente va cobrando distinta fuerza con el paso del tiempo. Podemos imaginar a un niño, entre los 5 y los 11 años, de pie en la corriente de la heterosexualidad, el nivel del agua es muy bajo, no llega ni a su cintura, las aguas frescas de la sexualidad van fluyendo suavemente a la altura de sus tobillos, en esta edad pre-adolescente del desarrollo sexual humano.

En este periodo de la infancia, la sexualidad es fresca (no muy agradable ni atractiva); fluye suavemente (no muy poderosa); y tan solo se encuentra a la altura de sus tobillos (por lo tanto, no es muy dominante).

Pero ahora imagínate al adolescente, entre los 12 y los 19 años. A esta edad, la corriente de la sexualidad ha llegado a ser un río caliente (muy placentero) y muy rápido (por lo tanto, muy poderoso), que llega a la altura de su quijada (ahora es muy dominante). Durante el resto de la vida adulta, la sexualidad es una fuerza muy poderosa, dominante y placentera en la vida de una persona. El hecho es que como adultos somos personas bastante sexuales.

·        La corriente de la heterosexualidad.

Ahora imagínate de nuevo aquella corriente. Es importante que notemos que ver la sexualidad humana como una corriente, nos ayuda a comprender varias realidades acerca de ésta y el desarrollo de la homosexualidad.

Primero, es importante repetir que la corriente de la sexualidad, como fue diseñada por Dios, es heterosexual solamente. Por lo tanto, la sexualidad humana tiene como salida una unión física, emocional y espiritual con el sexo opuesto.

Segundo, la sexualidad humana es una poderosa fuerza que siempre está fluyendo. No puedes detener una corriente de agua cuando está fluyendo. Si la bloqueas con piedritas, piedras o con rocas, buscará de nuevo su camino por encima o alrededor de los obstáculos y continuará su curso. Otra corriente, o varias corrientes se formarán como resultados de los bloqueos. Las líneas de arena que hacía en la playa mientras jugaba cuando era niño, se llenaban con el agua que venía de la marea del océano. Si bloqueaba con piedritas estas corrientes, el fuerte fluido de la próxima ola ocasionaba que el agua se desbordara y formara otra corriente.

Así es la sexualidad humana: Una poderosa fuerza que siempre estará activa y buscará expresarse de una forma u otra. Si la corriente de la heterosexualidad humana se bloquea en la infancia o en la adolescencia, probablemente formará otras corrientes (estas serán las desviaciones o desorientaciones), de la corriente principal. Así que, a pesar de estos bloqueos, “buscará algún tipo de expresión”.

·        Diferentes “tipos de expresión de la sexualidad humana”.

En el estudio y tratamiento de los problemas sexuales, hay numerosas desviaciones que pueden ocurrir en un hecho tan complejo como la sexualidad humana: Transexualidad, travestismo, fetichismo, sadismo, masoquismo, exhibicionismo, voyerismo, prostitución, promiscuidad y muchos otros.

La homosexualidad es una de las desviaciones más comunes, o lo que podríamos denominar desorientación de la corriente principal del desarrollo heterosexual. No es algo con lo cual la persona ha nacido. Por el contrario, es una desorientación sexual que sucede cuando la corriente heterosexual, diseñada por Dios, es bloqueada.

La homosexualidad no es una orientación sexual alterna, sino una desorientación causada por un desarrollo emocional que ha sido bloqueado en la corriente de la heterosexualidad.

¡Pero aquí está la buena noticia!  Cando estas piedritas, piedras y rocas se reducen, disminuyen o retiran con éxito, la sexualidad humana puede retornan a su fluido heterosexual normal, es decir, hacia la salida apropiada que Dios diseñó. Por ejemplo, expresiones sexuales y emocionales dentro del matrimonio, saludables y maduras, con una persona del sexo opuesto.

Para los esposos que han venido sufriendo la homosexualidad también se aplica la terapia de reorientación que es una forma de ayuda para que los triunfadores remuevan las salidas emocionales homosexuales que se han vuelto un hábito.

·        Identificando los obstáculos que motivan las desviaciones.

¿Cuáles son algunas de estas piedritas, piedras y rocas? Las piedritas y piedras que bloquean la corriente, son el resultado de relaciones no transparentes a nivel familiar, o directamente con los padres, ausencia de buenas relaciones entre compañeros, técnicas deficientes al tratar con la tentación, falta de comprensión acerca de la homosexualidad y otras.

Algunas de las rocas son: Baja autoestima (BAE), vacío de género (VG), conversaciones internas negativas, un área de las emociones herida (complejo de privación), debilitamiento espiritual y ansiedad en cuanto a la intimidad con el sexo opuesto.

Los desvíos del comportamiento que continúan reforzando la homosexualidad deben ser disminuidos o eliminados. Estos son básicamente cinco: Encuentros sexuales, dependencias emocionales, masturbación, pornografía y la complacencia visual o lujuria.  

Con el acompañamiento o consejería que te brindará Arcoíris, podrás ir superando y sanando cada una de estas áreas que te han tenido atrapado en la homosexualidad, o en cualquier otra de las formas de desviaciones de la corriente de la sexualidad.

·        Descubriendo el influjo de entes malignos en las desviaciones sexuales.

Es importante subrayar, que en muchas de las conductas en que se encuentra sumida una persona en las desviaciones  sexuales, se llegan a sumar otras fuerzas que no hay que descuidar, son las fuerzas del reino de las tinieblas. La comisión de los pecados de la carne, abren la puerta para que entren en los humanos distintos entes malignos, ellos tienen varias jerarquías, a veces actúan solos y en muchas ocasiones están asociados a otros entes malignos; además, tienen jerarquías diversas y por la misma razón, llegan a tener jefes que los dirigen y hacen actuar de diferentes maneras.

La ignorancia ha sido la causa de que el reino de las tinieblas se esté extendiendo tan rápidamente por el Mundo, hasta Yahvé Dios ha dicho: “Muchas de las Naciones han sido destruidas por falta de instrucción y conocimiento”.

No solo Satanás, sino muchos entes malignos más, están actuando arduamente en estos tiempos llamados final de los últimos tiempos para ganar almas, que no es lo mismo que final del Mundo, para lo que falta más de mil años como lo confirma el libro del Apocalipsis. Los entes del reino de las tinieblas saben que les queda poco tiempo para perder a las almas y arrebatárselas a Dios para llevarlas al Infierno.

Pero Dios es más poderoso que cualquier demonio, ángel caído o potencia infernal; Dios es más poderoso que cualquier secta o que cualesquier maleficiero, porque éstos también hacen trabajos diabólicos para atar a los seres humanos a demonios para que ejerzan influjo e inclinen con fuerza a los humanos y moverlos hacia la comisión de pecados de homosexualidad o de cualquier otra desviación de la heterosexualidad.

Dedicaremos algunos capítulos donde se presentan testimonios de personas que padecieron influjos maléficos para estar atrapados en las desviaciones sexuales.

Como se puede apreciar, este es el Blog del Ministerio más completo que puede ayudarte a salir de las trampas y engaños en que viven sumidos muchos hijos de Dios y de la Virgen María, Madre de la Humanidad, Quienes quieren que Sus hijos vivan en plenitud verdadera y con el equilibrio emocional y los conocimientos que los mantendrán sanos, salvos y sabios, pues siendo hijos del Rey de Reyes, son Príncipes a quienes cuida y ama Su Madre, vencedora además, de todo ente maligno, pues Ella es Medianera de todas las Gracias, Madre de la Misericordia y de la Sabiduría, y Reina de todos los Ángeles, de los de la Luz y de las tinieblas, aunque a estos últimos les pese.

¡En hora buena, estás en camino del restablecimiento de todas las bendiciones con que Dios te ha creado y diseñado!
Skype: arcoiris.magnifico

miércoles, 17 de octubre de 2012

LOS TRIUNFADORES VENCEN LA HOMOSEXUALIDAD


Capítulo 1.1

¡Cómo ser un “Triunfador”!
Como en todo lo que se hace con gusto y empeño, de la misma forma para lograr la plenitud de tu vida, debes iniciar con la convicción  de que la homosexualidad puede ser vencida, de igual manera que Ricardo la está venciendo. Tu naciste y ahora puedes volver a ser una nueva creación como hijo de Cristo Jesús y de la más amorosa de todas las madres, de María Virgen, porque además, el Espíritu de Cristo Jesús vive en ti, porque Él ha derramado el Amor de Cristo en tu corazón.
Esta es la razón por la que Pablo entendió que para tener la fortalece que nos permite lograr el cambio, necesitamos de la ayuda de Cristo Jesús y de la Virgen María, quien juega un papel muy importante en el proceso de nuestra sanación de la homosexualidad.

En la Palabra de Dios encontramos eso que entendió Pablo diciendo:

¿Quién nos separará del amor de Cristo? (Rom.8,35)

Al que venciere, le concederé que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono (Ap. 3,21).
El amor de Cristo actuando en ti, no solamente te ayudará a vencer la homosexualidad, sino que te hará crecer de mil formas. Tú eres un triunfador con él.
Jesús te invita a forma parte de esa clase especial de individuos que se distinguen debido a que rehúsan ser aplastados y vencidos por las circunstancias negativas. Ellos están decididos a crecer, a pesar de la adversidad; y no considerándose mártires ni estoicos de hierro, son personas realistas que firmemente han optado por tomar decisiones responsables a pesar de que han sido expuestos a circunstancias injustas, y dificultades injustificadas. Ellos son verdaderos “triunfadores” porque han decidido vencer las circunstancias que los colocaban en una posición de vida de muchos sufrimientos.
¿Y tú no quieres ser un triunfador? ¿No te gustaría ser de este tipo de personas que pese al desafío de las dificultades y de la condición de vida en que han vivido decidieron hacerle frente de manera sabia y sana, con valor y entusiasmo, sin dejarse vencer por las adversidades?
En este Blog de Arcoíris encontrarás muchísimos recursos, consejos y apoyos para vencer a la homosexualidad, además de las consultas que podrás hacer de manera directa a través de los medios que se indican con este propósito para estar en constante contacto contigo. Recuerda, no estás solo nunca más, cuentas con la ayuda del Cielo y la asistencia de los consejeros que colaboran en Arcoiris.